3 de marzo de 2016

José Aranda López

José Aranda López. Maracena (Granada), 1936.



Trabajador del campo, luego albañil. Su familia pertenecía a los que perdieron la guerra y algunos tíos y tías suyos habían sido vejados y asesinados por los vencedores.

No así su padre y madre. La extrema necesidad que sufría su familia motivó que apenas pudiera asistir a la escuela. A finales de la década de los cincuenta, fundó, junto a otros jóvenes de Maracena (Granada), la Peña de los Celtas, asociación cuyos objetivos eran sociales pero también recreativos. Este espacio de sociabilidad permitió la gestación y confluencia de inquietudes políticas. Unos cuantos socios, entre los que se encontraba, re/fundaron el Partido Comunista en Maracena.

La policía los detuvo en 1961 y terminaron condenados en consejo de guerra en la Plaza de Granada, si bien la instrucción la realizó el juez militar Enrique Eymar, que se desplazó expresamente a Granada. Fue condenado a dos años por “auxilio a la rebelión”. Trabajador capaz y emprendedor rehizo su vida en La Herradura- Almuñécar (Granada), donde a veces, sobre todo al principio, tuvo que defenderse de los bisbiseos y las habladurías que generaba su pasado.