La suerte de un loco es dar con otro. En finales del Siglo XIX y en una conjunción de lunáticos, el Duque de Wellington y su Administrador Horacio Hammick, intentaron cambiar el nombre al Soto de Roma y a la Dehesa Baja de Íllora por el de Wellingtonia.
Vamos que como en la Película El Gran Dictador de Chaplin querían crear un mini-estado en la Provincia de Granada y para muestra un botón...
Aquí están las fotos del Castillo que se quería construir...
11 de junio de 2013
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