10 de enero de 2012

La Crisis en Íllora


Desde hace tres años, no hablamos de otra cosa que de la situación económica, el desempleo, la bolsa, la prima de riesgo, los mercados, la especulación, las hipotecas basura, los políticos que no la resuelven...

Pero la Historia no enseña que esta Crisis que actualmente padecemos no es mas que la repetición de otras que asolaron la economía de los pobres jornaleros y colonos, cargando estos con las consecuencias desde hace siglos, no hemos aprendido nada en este tiempo y así se da el caso de que repetimos los mismos errores.

La eterna lucha de los Propietarios que preferían dejar las cosechas sin recoger, su situación económica lo permitía, frente a los jornaleros que si no trabajaban un día no podían llevar el pan a sus hijos.

Por suerte para nosotros hay tres factores que hacen que esta crisis actual sea diferente: 
Primero las políticas sociales que se han desarrollado desde los gobiernos socialistas para crear un Estado del Bienestar.
Segundo la Garantía a través de los gobiernos socialistas de la Junta de Andalucía de una Educación publica obligatoria y gratuita, una Sanidad modélica gratuita y universal, y un apoyo a los mas débiles a través de las Políticas de Igualdad y Dependencia.
Tercero, y quizás lo mas importante, la Democracia que nos iguala a todos con nuestro derecho al Voto y a través del mismo a decidir quien nos gobierna, a premiar con un nuevo mandato a los que luchan por nuestros intereses y castigar a los que nos engañan.

Como ejemplo de lo que digo, aquí va un articulo aparecido en el diario madrileño EL DIA del miércoles 16 de Agosto de 1882


Miseria en Andalucía
Siguen clamando los diarios de Granada en pro de medidas que pongan término a la crisis de la clase jornalera en aquella provincia. La triste situación por que atraviesan los pueblos descríbela uno de los periódicos á los cuales nos referimos en términos tan desconsoladores como exactos.
«La Hacienda, dice, apremia á los municipios; los municipios embargan sus mermados bienes á los labradores; éstos ejecutan á los colonos; los colonos no pueden dar trabajo á los obreros porque las cosechas son nulas, y lo poco que producen los campos no basta
para el pago de las rentas é impuestos; el trabajador tiene que mendigar de puerta en puerta un pedazo de pan para sus familias, y en esta escala de horrible infortunio todos se precipitan hacia el ultimo escalón: hacia la miseria y el hambre...»
Qué triste y qué extenso es el catálogo de las localidades castigadas!, Bracana, Tocón y Alomartes, en Granada, cuentan en su corta población más de 500 obreros sin trabajo, que en busca de él se han dirigido al alcalde de Íllora.